ARTURO MEMBREÑO: Hombre de fidelidad y visión
Por Pastor Cándido Ramírez Sánchez*
Con su característica sonrisa y su carácter afable, nos recibe en su casa de habitación. Luego nos conduce hacia el Complejo “Betel” donde se ubican las instalaciones de la Asamblea de Dios “Betel”-que dirige-, y el Liceo Cristiano “Rev. Juan Bueno”.
Dichas edificaciones se ubican en una elevación, con una vista panorámica, al sur de la Ciudad de San Francisco Gotera, cabecera del oriental Departamento de Morazán. Los detalles de su vida y ministerio, que nos comparte en la entrevista que les sintetizamos a continuación, revelan detalles de la personalidad detallista, visionaria, perspicaz, amorosa y llena de fe de este Pastor, durante los cuarenta y ocho años de trabajo.
Cuéntenos acerca de su origen y familia Soy originario del Cantón Ojos de Agua de Villa El Rosario. Nací el 12 de octubre de 1949. Mis padres: Bonifacio Díaz e Inocente Membreño. Mis hermanos: Santos Adrián, Faustina y Samuel. ¿Cómo fue su conversión a Cristo? Asistí seis meses a la iglesia antes de convertirme, (curiosamente) para recibir clases prebautismales. Eso porque estaba enamorado de la hija del Pastor, que era mi novia y ahí estaba ella. Arturo Membreño era el primero en estar en el culto. Luego acepté a Cristo y me integré a la “iglesia”.
¿Cómo fue su llamado al ministerio? Dios tiene mil formas para llamar a sus siervos. En mi caso, dos años después de haberme convertido, mi Pastor, Horacio Argueta, renunció a su trabajo pastoral en Ojos de Agua, y los hermanos de la iglesia vieron que yo tenía vocación, por eso me pidieron que me hiciera cargo del grupito de hermanos. Inicié un día martes 18 de junio de 1969. Pastoreé ahí 14 años con 22 días.
A ese altura, ya teníamos 214 miembros Cuéntenos algunas experiencias de su ministerio Yo pude ver la mano de Dios en formas sobrenaturales. En una ocasión tuve que ir hasta Villa El Rosario para pedirle al ejército que no bombardeara el caserío. Cuando yo llegué cerca del “pueblo” una neblina cubrió todo mi camino. Pasé por entre los soldados que estaban de guardia hasta llegar a la plaza donde estaba el Comandante y el puesto de mando. El hombre se sorprendió y me dijo: -“¿Cómo llegaste hasta aquí? Mi gente tiene órdenes de dispararle a cualquier desconocido”. Entonces yo le expliqué quién era y a qué había llegado. Dios me preservó la vida. -Me dijo: “No hay duda que Dios te ha protegido”
¿Qué elementos han contribuido al éxito ministerial de Arturo Membreño? Soy alguien que me gusta buscar a la gente donde esté. Mi seguimiento a las almas inmediatamente. Soy parejo con todos. La gente sabe que los buscamos no para que nos den, sino para ayudarlos. Hace 20 años iniciamos una clínica para atender a la gente pobre. En la medida de lo posible, le servimos a la gente en sus necesidades. Espiritualmente hablando, me gusta que en nuestras reuniones haya más Palabra y oración que canto. Tenemos buenos ministerios de alabanza, pero le damos prioridad a La Palabra.
Una cosa que me ha sido de mucha bendición es mi fidelidad en la entrega de los diezmos. Me propuse diezmar literalmente “de todo lo que Dios me dé”. Aprendí a diezmar en los mismos inicios de mi vida cristiana. Ya le conté que recibí “doctrina”, aún antes de convertirme al Señor. Desde entonces me propuse llevar un registro de todo lo que recibo, hasta una taza de café que me regalan, le pongo precio y al final del mes, doy el diezmo de eso. Dios me ha dado su bendición de forma extraordinaria. Tanto en la iglesia como en lo personal.
¿Cómo conoció a su esposa antes de casarse y qué importancia tienen ella y sus hijos en el trabajo ministerial? Pues, fue un milagro. Tuvimos un noviazgo de cuatro años. Ella y su familia no querían que se casara con un Pastor, por lo que los ministros sufren. Pero cuando Dios trató con ella, entonces se decidió y nos casamos el 23 de marzo de 1974. Ella es un gran apoyo para mí, como persona y como ministro. Tiene un ministerio singular. No es una persona que le guste estar al frente en público.
Ella se dedica a cuidar a los niños y a los jóvenes en la iglesia. Les da muchísimo amor. Personalmente me cuida, me apoya. En mis tres operaciones de columna ha sido muy especial, atendiéndome y cuidándome. Es una mujer muy sabia. Tiene una palabra profética. Una gran virtud de ella es que nunca ha sido celosa. Yo creo que un Pastor debe tener una esposa que no conozca los celos. En cuanto a mis hijos, lo principal es que nunca me han deshonrado. A ellos, igual que a mi esposa, no les gusta estar en público, pero me apoyan.
Háganos una síntesis histórica de su ministerio en la Iglesia “Betel” de San Francisco Gotera. Recibí como 75 personas el martes 12 de julio de 1983. La iglesia anduvo errante por varios lugares de la ciudad. Cuando llegué alquilábamos un local en Barrio Soledad. A fines de 1983 nos trasladamos al templo que logramos terminar de construir. El Señor nos bendijo de tal manera que fue necesario ampliar el templo hasta cubrir todo el terreno. Después compramos otro terreno al frente para atender a los niños y así fuimos adquiriendo otras propiedades.
Siempre soñé con tener un colegio cristiano. Fundamos un colegio al que le llamamos “Colegio Betel”, pero, por disposiciones del Ministerio de Educación, tuvimos que cambiar el nombre. Y aunque los líderes de la iglesia me pidieron que le pusiéramos mi nombre, les dije que no. Así que buscamos la conexión con el Liceo Cristiano “Rev. Juan Bueno”. Y ahí está. Ahora tenemos una congregación promedio de 500 miembros en propiedad y 100 catecúmenos. Hemos fundado once filiales: En el Divisadero, Chilanga, Colonia Llano Verde (Gotera), Agua Blanca (Cacaopera), Colonia San José (Gotera), San Simón, Caserío Tiquisera (San Simón), entre otras.
¿Cómo adquirieron estos terrenos y sus edificios? Compramos primero manzana y media de terreno. Después compramos una manzana para construir el colegio. Nunca hemos adquirido préstamos; tampoco me gusta andar pidiendo. Ha sido puro esfuerzo de la congregación y de algunos pocos donativos que hemos recibido. Lo logramos a través de actividades de la iglesia. Tenemos un lema: “Comiendo, seguimos construyendo”.
¿Qué cargos ha desempeñado en el servicio ministerial? Inicié como Presidente Local de Jóvenes Embajadores de Cristo y maestro de Escuela Dominical. Después serví como Presidente Regional, atendiendo los Distrito de Gotera y Perquín. Luego serví como Tesorero Nacional de Embajadores de Cristo. Por 14 años serví como Presbítero de Distrito. Director de Misiones de la Zona Oriente. Actualmente me desempeño como Vocal de la Comisión Nacional de Misiones y de la Comisión Administrativa de los Liceos Cristianos “Rev. Juan Bueno”
Cuéntenos algo de su ministerio en los medios Comencé con el programa radial “Cristo para todos, todos para Cristo”, que trasmitía en circuito cerrado aquí en la ciudad. Luego, hace 25 años comenzamos con el programa “Ríos de Alabanza” en Radio Estero Visión de San Miguel. Después lo trasladamos a la Radio “Segundo Montes”. Luego que nació Radio Verdad, trasmitimos también. Y ahora, Dios nos da la oportunidad, sin pagar un centavo, de trasmitir el programa en Nueva York, en la Radio “Jesús es Luz”. También trasmitimos en Radio “El Buen Pastor” aquí en de la ciudad. Con el “Canal de La Bendición” ya cumplimos 14 años hoy en noviembre. Trasmitimos en vivo nuestros cultos.
También aprovechamos las redes sociales. Trasmitimos los cultos en vivo a través de Facebook. Además, trasmito “Un momento con el Pastor”, programa de cinco minutos que, desde enero hasta junio de 2017, ha sido sintonizado por más de medio millón de personas. Tenemos audiencia en muchas partes del mundo, especialmente en México, Canadá y Estados Unidos. Creo que las redes sociales pueden ser de bendición, si se usan bien. Depende de cómo la persona lo use. Si el apóstol Pablo y el Señor Jesús vivieran hoy, seguramente las usarían.
¿Cuáles son sus proyectos a corto y mediano plazo? Completar la construcción del templo. Poner el piso de porcelanato y el cielo falso. En el área espiritual quisiéramos levantar y formar nuevos obreros y enviarlos a ganar almas. Hasta hoy hemos enviado obreros que sirven en el país, pero también en Arkansas, Nueva York y Los Ángeles. Seguir con las campañas evangelísticas que realizamos cada año.
También queremos seguir atendiendo a las misiones. Sostenemos a ocho familias misioneras, además, de los pastores e iglesias filiales.
¿Qué consejos les daría a los pastores jóvenes? Unas de las cosas básicas es la humildad: Amar y tratar a todos por igual. No jactarse de lo que sabe. Segundo, la pasión por las almas: Interesarse por la salvación de las almas. También la perseverancia. No se adquiere todo de la noche a la mañana. Otra cosa también es la integridad, el buen testimonio. En quinto lugar, el sometimiento a la autoridad.
¿Cómo un Pastor puede aplicar la ética ministerial? Ética es respetarse unos a otros. No conquistarle los miembros a otro Pastor.
¿Qué importancia tienen los jóvenes en la iglesia cristiana? Los jóvenes son importantes porque alegran nuestras reuniones. Son la fuerza de la iglesia. Yo le pido a Dios que me permita ser un viejito alegre, con espíritu juvenil.
¿Qué mensaje tiene para los lectores de LUZ Y VIDA? Que no se pierdan ninguna edición. Que la compren y la compartan con otros
*El autor es miembre de la comisión Administradora de Revista LUZ Y VIDA.
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